Para todo aquel que no tenga el placer de haber hundido alguna vez sus pies en la arena de una playa gallega. (Si! son mis piernas, ya sé que estoy paliducha, por eso estoy trabajando en ellooooo...)
Para los que no sepan lo que es sumergirse en el océano Atlántico, que a pesar de estar frio de....muy frio! cuando tienes calor por haber estado un rato al sol, y decides sumergirte, al menos de este mar sales refrescado. Lo siento, no es por menospreciar a otros mares, pero en el Mediterráneo, en la zona de Alicante, me sentí como un fideo en una sopa hirviendo...quizá sea la falta de costumbre, pero no me gustó la sensación.
Encima el agua es cristalinéeeerrima. Da gusto no encontrarse con algas y demás cosas pringosas a cada paso.
Merece la pena, con creces ir a pasar un día al menos a Illas Cíes. Eso si, voy a hacer varias advertencias:
1. Abrigarse en el barco que lleva allí.
2. No ir cargados, que es un coñazo andar con los bartulos por la playa.
3. Como siempre, en el tres va lo más importante: LLEVARSE UN ARMA ANTIGAVIOTAS. Que especie de aves más aaaajjjjjjjjjjjjjj. Ya no me gustaban mucho de antes, pero allí te ven sacar un trozo de pan y te acechan, te sobrevuelan, te lo roban si pueden y encima si se presenta la oportunidad, te lanzan un proyectil en forma de caca....sin comentarios. Me dieron ganas de hacerme un caldo con todas ellas.
Recomendadisimas la Cies, para el año probaremos las Ons a ver que pasa. Espero allí no habiten las gaviotas.
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