Su forma de autoinmolación sería posteriormente repetida por otros,pero él fue el más recordado, ya que fue atestiguado por David Halberstam, un reportero del New York Times que escribió sobre este suceso lo siguiente:
"Estaba viendo de nuevo la señal, pero una vez fue suficiente. Las llamas estaban surgiendo de un ser humano; su cuerpo fue marchitándose lentamente, su cabeza se ennegrecía. En el aire había un olor a carne humana quemada; el hombre se quemó sorpresivamente rápido. Detrás de mí pude escuchar el sollozo de los Vietnamitas que estaban ahora en la entrada. Estaba demasiado sorprendido para llorar, demasiado confundido para tomar notas o hacer preguntas, además desconcertado para inclusive pensar... Mientras se quemaba él nunca movió un músculo, nunca pronunció un sonido, su calma exterior en agudo contraste con la gente que se lamentaba alrededor de él".
Después de su muerte, su cuerpo fue cremado conforme a la tradición budista. Durante la cremación su corazón se mantuvo intacto, por lo que fue considerado como santo y su corazón fue trasladado al cuidado del Banco de Reserva de Vietnam como reliquia.
Mensa
Hace 1 semana
1 comentario:
Una forma caliente de protestar, lo desesperado que hay que estar por una causa para hacer una cosa así, verdad?
Saludos!
Publicar un comentario