Experiencia (mala o buena)

"Experiencia es el nombre que damos a nuestras equivocaciones"

Oscar Wilde.

Interpretando.

La palabra escrita es peligrosa. Ya lo dijo Delphine Gay (Madame de Girardin): 'Es el acento el que convence y no la palabra'. No porque se quede reflejada en un medio menos temporal que la hablada, si no porque es susceptible de multiples interpretaciones por el lector.

Es complicado saber el tono que alguien dió a una frase que escribe, si no tenemos el conocimiento necesario sobre el escritor o escritora... y aún así, a veces dan lugar a dudas.
El tono, la fuerza, las pausas, el enfasis en palabras concretas. Podemos intentar reflejarlo con puntos supensivos, con mayusculas, con palabras en negrita. No será nunca lo mismo.

Pero, por otro lado, ¡es tán fácil escribir!. Tán simple, si lo comparamos con decir todo lo que queremos o necesitamos, hablando. Deja el tiempo de reacción necesario para decir las cosas meditando antes, colocando las frases en el orden preciso, eliminando las palabras que no deseamos que lean. Nos da un mayor control.

Silencio, Gracias.

How bout me not blaming you for everything
How bout me enjoying the moment for once.
...
Thank you thank you silence.

Gracias, porque me da ese rato de paz para pensar. Porque me permite oir como me hablo desde el interior, incluso cuando ni yo quiero escuchar lo que me digo.
Gracias, porque me permite saber cuando son incómodos, y cuando me siento a gusto a pesar de ellos.
Gracias, porque me dan el impuso necesario antes de los actos. Aunque me equivoque, aunque sean dificiles, antes fueron meditados en SILENCIO.