Domingo... Me he despertado temprano, y canturreando esta canción. Es muy posible que se deba a que el viernes tuve la suerte de ver a Maria Arnal y Marcel Bagés en su concierto en Vigo. También es muy posible que se haya incrustado en mi mente porque me declaro hipnotizada por la voz de Maria y las guitarras de Macel.
Sin embargo, el motivo de pensar ahora en ella es porque tras ver las noticias, compruebo que está de plena actualidad. Su "Cançó del taxista" habla de cielos nublados, tiempos borrascosos (advierto que no se refieren a la meteorología) y de gritos en las calles contra gigantes que suman solo un 1%. Lágrimas en los ojos es lo único que parece que podamos permitirnos.
Muero de pena al ver la sociedad que estamos dejando a nuestros herederos.
Por si alguien se ha dejado hipnotizar también, Maria y Marcel cuentan antes de cantar esta canción, que proviene de una jota y canción de la resistencia española, catalogada en los años 60, que cantaba un taxista de Madrid.
Es, como dice Maria, una canción que «gira sobre sí misma casi obsesivamente, como una fila de prisioneros alrededor del patio de una prisión».
Es, como dice Maria, una canción que «gira sobre sí misma casi obsesivamente, como una fila de prisioneros alrededor del patio de una prisión».